Circuitos Grupales Europa

Europa es el destino turístico número 1 del mundo, la gran variedad de sus paisajes, la diversidad de sus climas y su historia la convierten en el lugar favorito de los viajeros para pasar las vacaciones. Con un pasado tan histórico es imposible no asimilar algo de historia durante su viaje.

Desde Inglaterra y Francia hasta Italia y Alemania, los países europeos están llenos de ciudades vibrantes conocidas por sus museos, restaurantes, vida nocturna y arquitectura. No sorprende que decidir qué lugares son los mejores para visitar en Europa pueda ser difícil. Simplemente no hay forma de visitar los países de Europa y no quedar asombrado por su belleza natural, su historia épica y su deslumbrante diversidad artística y culinaria.

La riqueza casi inmanejable de atracciones de las ciudades de Europa es su mayor atractivo: el lugar de nacimiento de la democracia en Atenas, el arte renacentista de Florencia, los elegantes canales de Venecia, el esplendor napoleónico de París y el lienzo histórico y cultural de múltiples capas de Londres. Atracciones menos obvias pero no menos impresionantes incluyen los palacios árabes en Andalucía, la fascinante mezcla de Oriente y Occidente de Estambul en Turquía, la majestuosidad de los palacios imperiales meticulosamente restaurados en la antigua capital de Rusia, San Petersburgo, y el proyecto en curso de La Sagrada Familia de Gaudí en Barcelona.

Plaza de Cibeles, Madrid - Europa

Tours Clásicos

Florencia

Tours Plus

Plaza de España en Sevilla

Tours Regionales

Ámsterdam, Países Bajos

Tours Baratos

Viajar a Europa con Tour a Europa

Conocido cariñosamente como el “viejo continente”. Viajar a Europa es el sueño de muchos y hay muchas razones para hacerlo: su historia, cultura, arquitectura, monumentos, paisajes y gastronomía; por algo, muchos de los platillos del viejo continente se han ganado la fama internacional.

Puede probar las delicias que ofrece el Mar Mediterráneo, por ejemplo: en España una paella o unas tapas acompañada con un Rioja o los deliciosos platillos de bacalao de Portugal, ¡sabía que hay más de 365 platillos, para comer uno cada día!, y de digestivo un buen vino de Oporto.

No olvidemos las recetas de la abuela en la cocina italiana como: unos ravioles, lasaña, risotto, tiramisú o una pizza napolitana. O disfrutar del sabor y la delicadeza de la comida francesa, acompañada de un vino de Bordeaux y al final degustar uno de sus famosos postres, como: los Éclairs o un delicado Macaron.

Las Islas Británicas nos ofrece para empezar un día con mucha energía, tomar un típico desayuno irlandés, que se compone de: salchichas, jamón, morcilla negra y blanca, huevos, tomates, judías con más tomate y mantequilla. Y sí quedó con hambre, tiene platillos que van desde las deliciosas sopas y cremas de Escocia, que junto con un whisky ayudan a calentar el cuerpo, o el famoso Shepherd’s Pie (Pastel de Cordero y Patatas) de Inglaterra, hasta el popular y tradicional “Fish & Chips”, que consiste en trozos de bacalao, los cuales se empanizan y fríen hasta que queden crujientes, jugosos y sabrosos, acompañados de papas fritas y una cerveza.

Viajando un poco más hacia la Europa del Norte, encontraremos los sándwiches ahumados de salmón o de arenques de los países escandinavos.

¡Pero tenemos que hacer un alto! No podemos olvidar los típicos mejillones de Bélgica, aderezados con una salsa de vino y acompañados con papas y de postre, llegó el momento de pasar de lo salado a lo dulce, un esponjoso gofre o más conocido como waffle, acompañado con helado, nata montada o salsa de chocolate, que en este último punto, los belgas destacan por fabricar los más exquisitos y finos chocolates, donde marcas reconocidas a nivel mundial llevan años deleitando los paladares más exigentes.

La Europa Central nos ofrece unos deliciosos y nutritivos platillo como el “Gulash Húngaro”, que es un caldo espeso de carne, cebolla y pimentón; cada país de esta región hace su propia versión para darle su estilo pero apegándose a la receta original. Al hablar de Alemania, lo primero que se nos viene a la cabeza son “salchichas y cervezas”, pero el arte culinario de este país va más allá. Sin duda es impresionante que podamos encontrar más de 1,500 variedades de salchichas, siendo las de Frankfurt las más suaves, las de Núremberg son las asadas y las de Baviera son blancas. Pero no solo salchichas encontraremos en Alemania, también está el Chucrut, un acompañamiento de col fermentada para las carnes y embutidos, el Eisbein que es el codillo de cerdo, horneado a bajas temperaturas por hora para que su carne se deshaga en la boca o para picar entre comidas, podemos degustar un Brezel (mejor conocido como Pretzel) que por lo general son salados y de distintos sabores pero también se encuentran los dulces.

Y llegó el momento de ponerse muy refinado y elegante con caviar rojo o negro de Rusia, uno de los manjares del país más conocidos internacionalmente

Dejemos la comida y adentrémonos en los paisajes que nos ofrece Europa. Si le gusta el ambiente entre bosques y montañas, los Alpes son perfectos. La Región de los Alpes abraza: Francia, Mónaco, Italia, Suiza, Alemania, Austria, Liechtenstein y Eslovenia.

O si prefiere historia de vikingos, fiordos, nieve, frío gélido, auroras boreales, valles imponentes, glaciares, renos, hoteles construidos con hielo… estos son algunos de los atractivos y experiencia que se puede vivir en Noruega, Islandia, Finlandia, Dinamarca o Suecia, países con una cultura propia que encanta a gente de otras latitudes que les llama la atención vivir una experiencia diferente.

En Europa del Este encontrará las grandes capitales imperiales, con sus palacios imponentes y entre las que se destacan: Praga, Viena, Varsovia, Budapest. Países como Eslovaquia nos regala hermosos paisajes y Rumania, sus historias y leyendas fantásticas.

Europa tiene todo y puede ser tan barato o tan costoso como el turista lo desee, por eso es uno de los continentes más visitados del mundo, y con justa razón, ya que tiene infinidad de propuestas turísticas para que cualquier persona, sin importar sus afinidades, itinerario o presupuesto, siempre se pueda disfrutar de una experiencia inolvidable.

Puede pasar días enteros recorriendo Europa para descubrir muchos lugares interesantes, cada uno con su propia historia y atractivo, arte, monumentos, castillos, palacios, callejones, comida y paisajes que le encantarán y va a querer volver una y otra vez.